EL FARO DE LAS LÁGRIMAS PERDIDAS – Hugo Stuven Casasnovas

Gracias a Ediciones Atlantis conseguí el libro. Lo vi y me encantó la sinopsis, así que me dije que tenía que leerlo y reseñarlo.


Zoe es un chico que ha perdido al amor de su vida. Decide alejarse de este y otros problemas en una cala de un pequeño pueblecito. Un día, buceando, descubre una cueva extraña de la que no sabe cómo salir sin ahogarse.
Más tarde, unos pescadores, lo encuentran en el mar y lo rescatan. Zoe no recuerda nada de lo que ha sucedido y, descubre, que algo ha cambiado.

Con una forma de escribir muy actual, capítulos muy breves y un personaje principal la mar de interesante, comencé a adentrarme en la historia.

Desde el principio, a pesar de ser un puro desastre, me congracié con Zoe que es el chico a través del que vemos y podemos vivir la historia.

Gracias a las pocas páginas que tienen los capítulos, la lectura se hace muy divertida y resulta bastante ágil.

Resaltar la calidad con que escribe el autor que, con una escritura sin adornos hace que la lectura resulta liviana y fluida, además de ser muy cuidada.

Según transcurre la historia, surgen más preguntas y más dudas, que te incitan a saber qué es lo que va a suceder, a qué va a conducir todo esto y si se va a cumplir el propósito de todo esto o sin embargo, el final va a ir por otro camino.

A lo largo del libro, se va conociendo cómo es el protagonista, cómo es su relación con Bárbara, la chica a la que ama, con su padre y cómo es su vida.

Es una historia de una vida de una persona que termina siendo mucho más que eso.

Un libro que sorprende, emociona y te hace llevar por tus sentimientos en todo momento, con un final que no te esperas y dónde el título del libro y el resto de la historia cobra realmente sentido.

Conclusión final: Con una manera de escribir de calidad, personajes con unos perfiles que puedan ser tus propios vecinos y una historia que te mantiene en vilo hasta el final, este libro está más que recomendado.

PUNTUACIÓN GENERAL (sobre 10): 8

PREMIO/S: Novela finalista del Premio Minotauro en el 2010.

Este premio se otorga cada año por la Editorial Minotauro a la mejor novela inédita de Ciencia Ficción, Terror o Fantasía.