Gracias a Naru Ishida por darme la oportunidad de entrar en este mundo donde lo malo, puede volverse bueno.
Cuando mi hermana y yo
descubrimos este libro, inmediatamente nos quedamos prendadas de él. Ella se lo
leyó antes que yo y me instaba a que me pusiera con él por lo mucho que le
gustó. Así que no tardé mucho en hacerlo, y realmente me encantó.
La historia desde un principio prometía: la lucha entre el bien y el mal, un amor prohibido y todo con un toque manga –en concreto, yaoi (género donde hay relaciones homosexuales)- que a mí me encanta.
Dayu Matsumura es un chico de larga melena roja, buena planta y ropas góticas cuyas muertes están asolando la ciudad. Su próximo objetivo es el ingenuo y dulce Seiya Ryusaki, pero cuando va a terminar con él; algo se lo impide. Algo sucederá y todo cambiará por completo.
La novela está aderezada con un par de personajes más, con mucha
importancia para la trama tanto futura como pasada. Por un lado, está Noriko
Hayasahi, una chica misteriosa que, aunque aparecerá en un segundo plano, será
primordial para la historia. Y, por otro, está Kunimatsu Saito, un personaje de
apariencia tan dura como su alma.
Bajo la influencia de la pluma de Naru, es inevitable caer en las garras de esta trama y enamorarse perdidamente de los dos personajes principales y admirar su intensa historia de amor. Con unas descripciones que te harán ir visualizando cada una de las situaciones como si de una película se tratara y unos personajes tan peculiares como los que te puedes encontrar en cualquier manga, seguirás toda la historia con angustia por lo que pueda suceder, pero que te sacará alguna que otra sonrisa, sobre todo por la ironía del propio Dayu ante la vida.
¿Triunfará el amor? ¿Ganará
el bien frente al mal? Os invito a que os adentréis en este libro y empecéis a
descubrir una novela que se desarrollará a lo largo de tres libros y que,
desde luego, no os dejará indiferentes.
Además, la autora, en su blog
y en el facebook tiene material adicional de la historia y los personajes que
te mantendrán siempre pendiente de su transcurso.
Para finalizar, y sé que me arriesgo a que unas cuantas fans se me tiren al cuello, quiero mencionar que odio el personaje de Saito, no porque esté mal perfilado, sino por el personaje en sí y su modo de actuar. Lo siento chicas, pero no le encuentro el encanto, al menos de momento. Para mí, Dayu siempre será Dayu.
Conclusión final: ángeles, el bien y el mal, amor prohibido… ¿Se puede pedir más? Una
historia cargada de acción, romanticismo y con unos personajes muy pecualiares
con mucha fuerza, con una escritura muy fluida que conforman una historia
genial.
PUNTUACIÓN GENERAL (sobre 10): 9,8